Recién había comenzado. En nuestra primer clase recuerdo nos fuimos con una mariposa hecha en la técnica Tiffany con nuestras propias manos.
Esa modalidad la tomé para estimular cuando dí clases; irse de una primer clase de vitraux con una pieza terminada no tenía precio!
Algo que uno vislumbraba como imposible se concretaba.
Para las clases venideras, había que ir provisto de maderitas para construir nuestro bastidores que iban a contener nuestros diseños cuadrados para poder enfocarnos en el próximo proyecto.
Para ese proyecto diseñé esta caja, ambiciosa yo! Quería un cuadrado con pretensión de ventana y lo logré!
La atesoro hoy en día, había quedado en escuadra, tenía muchas piezas y luego de algunas clases la pude concluir.